http://www.youtube.com/watch?v=BA_tkSWrchI
Ante el espejo, te veo,
dulce y jugosa, madura,
en días nublados
que agotan tu mente,
con ojos cerrados de
no querer ver ni
saber de ir a menos,
si el pelo que peinas
siembra tu suelo.
Que con ello no puedes,
ni quieres ese destino,
que está ya convenido,
en el mundo que nos rodea,
pensar que nada te espera
ni puede tener sentido.
Que la ciencia no define,
ni acierta, y piensas que
sin diligencia se aplica,
y que de tu desdicha,
no cae en la cuenta,
y el remedio
no encuentra.
Te quiero y decirte
quiero, que entiendo
el tormento, que sé
del sufrimiento,
pero no es posible
que en verte sin pelo,
te vaya la vida,
que vengo a decirte
que no necesitas,
ni peine ni pelo,
que llamo a los vientos,
que mecen y peinan
lo que tú eres por dentro,
que son mis esclavos,
que siempre hacen caso
cuando por ti los llamo.
Y podemos hacerlo,
te crezca el aprecio,
te invada el respeto,
y decir puedo
tantas veces
como oírlo quieras,
que es cosa de necio
pensar que lo que
de ti me enamora,
por lo que a ti
se te quiere,
pueda ser banal,
y encontrarse
en tu pelo.
Mantén la mirada,
fíjada en mis ojos,
siente mi presencia,
ábreme tu mente,
deja que te sienta,
préstame tu vida,
para que yo sepa.
Y quédate tranquila,
quédate segura,
quédate dormida.
Enfrentada al espejo,
tornado en amigo,
la carga no pesa,
te encuentras belleza,
te sientes princesa,
y a cada sonrisa,
tu melena se espesa.
